Si la semana pasada hablábamos sobre qué tipo de financiación podemos solicitar si decidimos realizar nuestro proyecto de obra y construir nuestra propia vivienda desde cero, esta semana le toca el turno a las dudas sobre los préstamos bancarios que podemos tener en cuenta si lo que queremos es comprar una casa prefabricada para instalarla en un terreno de nuestra propiedad.
En artículos anteriores hemos hablado sobre el auge que está teniendo el mercado de casas prefabricadas debido al aumento de demanda de viviendas unifamiliares en el ámbito inmobiliario por parte de las familias, y como ya hemos explicado, la financiación hipotecaria en el caso de la compra de viviendas prefabricadas, si comparamos con la compra de casas ya construidas, cambia.
Si queremos adquirir una vivienda de “segunda mano” y necesitamos financiación, pedimos una hipoteca a determinada entidad bancaria sobre un inmueble ya existente sobre el que se hace una tasación, que variará dependiendo de las características de este, y sobre la que el banco nos da un porcentaje determinado de ese valor de tasación, pero esto no se adapta exactamente a la cuestión que nos ocupa.
Y, ¿QUÉ OCURRE EN EL CASO DE LAS VIVIENDAS PREFABRICADAS?
Pues la clave está en el precio. Si la cantidad que vamos a invertir en nuestra vivienda es menor de 50.000€ puede que la entidad bancaria donde solicitemos financiación nos ofrezca un préstamo personal.
Ya sabemos que los préstamos personales tienen un tipo de interés más alto y un plazo de amortización más bajo entonces, ¿qué ventaja tiene pedir este tipo de financiación para comprar una casa prefabricada? Pues la clave está en que evitamos pagar los gastos de formalización de los créditos hipotecarios como los gastos de notaría, de tasación, etc., y, además, no existen vinculaciones a otros productos bancarios como en el caso de los préstamos sobre los que hemos hablado anteriormente. Todo va a depender de la capacidad económica del solicitante y del precio de la vivienda.
Si no nos convence este tipo de préstamo podemos pedir un préstamo hipotecario normal, aunque con alguna diferencia.
¿Qué criterios se siguen para conceder este tipo de préstamos y qué documentación nos van a pedir? En general, como ya hemos hablado anteriormente, los prestamos hipotecarios suelen concederse sobre un valor de tasación de un inmueble, pero en el caso de una vivienda prefabricada va a pesar más la capacidad económica del cliente y su nivel de endeudamiento que el valor de la propia vivienda.
Si nos planteamos pedir financiación para comprar una vivienda de estas características hay que tener en cuenta que nos van a pedir que cumpla ciertas características como, por ejemplo:
- La vivienda debe colocarse sobre suelo de calificación urbana, es decir, que cuente con servicios urbanísticos, lo que significa que tenga conexiones a redes de servicio, que esté consolidado por la edificación del modo que determine la legislación urbanística o esté ubicado en un núcleo de población. El terreno, como ocurre con el préstamo auto promotor
- La vivienda que coloquemos en este terreno no debe ser móvil, es decir, debe colocarse sobre unos cimientos ejecutados en obra firme.
- El proyecto de instalación de la vivienda debe estar firmado y ejecutado por un arquitecto o un técnico cualificado y debe estar firmado por el Colegio de Arquitectos correspondiente.
- Debemos solicitar y obtener la licencia municipal en el Ayuntamiento correspondiente al municipio donde instalemos la vivienda que justifique que esta se adapta a la normativa urbanística y la legalidad de la construcción.
- La vivienda debe registrarse correctamente en el Registro de la Propiedad correspondiente.
- La vivienda debe cumplir con la normativa de eficiencia energética vigente por lo que hay que elegir cuidadosamente el material con el que está construida para que sea resistente, duradero y de fácil mantenimiento, como acero u hormigón en contrapunto a la madera.
Y, ¿cuáles son las condiciones de concesión y amortización del préstamo? Por regla general, las condiciones de concesión del préstamo hipotecario son las normales de un préstamo hipotecario general: un 80% del valor del inmueble, corriendo el 20% restante, correspondiente a impuestos y gastos de gestión, a cargo del cliente, y los plazos de amortización hasta en 30 años.
La diferencia que existe entre este tipo de préstamos hipotecarios y los “normales” es que funciona, en el caso del pago del importe, exactamente igual que la hipoteca auto promotor: se entrega el dinero en plazos según avance la obra y el arquitecto vaya emitiendo las certificaciones correspondientes.
Como siempre os indicamos, si tenemos un terreno y queremos construir o si queremos comprar una vivienda prefabricada para instalarla allí, tanto en materia de financiación como en el proyecto constructivo, debemos contar con el asesoramiento de profesionales cualificados que nos orienten y conozcan este terreno. Si es tu caso, no dudes en contar con la experiencia de Calibe Asesores Inmobiliarios.