El mercado de las casas prefabricadas ya era un mercado en auge en Europa en la época pre pandemia, pero, actualmente, está alcanzando cotas muy superiores a las esperadas. La necesidad de espacios abiertos ha hecho que este sector disfrute de un auténtico “boom” en los últimos meses dentro de España.
El confinamiento generó un movimiento en muchas familias que se empezaron a plantear si la vivienda en la que residían respondía o no a sus necesidades lo que aumentó las búsquedas de hogares más grandes fuera de núcleos urbanos, pero también las reformas integrales. Este interés por el cambio no solo ha hecho que aumenten las ventas de viviendas unifamiliares, sino que también ha despertado el interés acerca del mercado de casas prefabricadas.
Son casas rápidas de fabricar y de instalar, más baratas que las viviendas convencionales, pero si estamos pensando en algo parecido a los bungalows de madera o los mobile homes que podemos alquilar en los campings, nada más lejos de la realidad porque en el mercado existe una amplia gama de productos, desde casas modulares de hormigón, casas de campo de madera hasta verdaderas joyas diseñadas con una amplia mezcla de materiales de construcción de altas calidades. Todo dependiendo del presupuesto del cliente comprador.
Por ejemplo, uno de los sectores menos convencionales, pero más en auge, es la construcción de casas prefabricadas con contenedores: una construcción modular que es duradera y que reduce costes e impacto medioambiental. En este caso se utilizan contenedores reciclados del transporte marítimo que se adaptan con todas las medidas de confortabilidad para funcionar como estancias de una vivienda ya que se aíslan térmicamente, tanto en el interior como en el exterior, con materiales eficientes que reducen emisiones y permiten su habitabilidad, pudiéndose diseñar desde una mini vivienda a una vivienda en varias alturas realizada con varios contenedores. La estructura y los materiales de fabricación de dichos contenedores hacen que no necesiten casi mantenimiento exterior salvo el que se aplica a la hora de la construcción y la facilidad de realizar diseños con ellos al gusto y presupuesto del cliente hace que este tipo de viviendas sean más que viables.
¿QUÉ VENTAJAS PODEMOS ENCONTRAR EN UNA CASA PREFABRICADA?
Las ventajas de las casas prefabricadas residen en que se están viendo como una solución a la falta de vivienda por sus precios más asequibles y como una opción para el sector del comprador joven para emanciparse.
Otro de sus beneficios es que no solamente en su construcción son respetuosas con el medioambiente, sino que, debido a los materiales empleados, reducen los consumos de agua y energía lo que repercute en un ahorro en las facturas de agua y gas del propietario.
Son, como hemos reseñado antes, igual de cómodas y funcionales que una vivienda de construcción usual pero más asequibles económicamente, tardan en fabricarse entre 5 y 8 meses, lo que es un plazo de tiempo bastante menor que una casa de obra, y el proceso de colocación no necesita grandes maquinarias siendo muy sencillo. Incluso, alguna vivienda, tiene la posibilidad de trasladarse de un lugar a otro cuando el propietario quiera.
Los precios, aun siendo más asequibles que una vivienda ya construida, van a depender de la empresa contratada, los plazos de fabricación y entrega, la ubicación de la vivienda, el diseño, los los metros, las calidades y los materiales, que pueden ser muchos como madera, pizarra, acero…aunque la estrella es el hormigón ya que permite hacer ampliaciones en función de las necesidades del propietario. Pero se pueden encontrar casas prefabricadas en un rango que abarca desde 35.000€ hasta más de 200.000€, dependiendo de si lo que queremos en una casa de madera de 50metros cuadrados o una casa modular fabricada en hormigón y cristal de más de 100 metros cuadrados.
Como hemos visto, adquirir una casa prefabricada puede ser, en muchos aspectos, una ventaja, tanto económica como medio ambiental, siempre y cuando ya tengas un terreno donde ubicarla. Y, ¿cómo se financia? Pues de eso ya hablaremos en otro momento.
