Estamos llegando al final de un agosto un poco raro y, en unos días, aparecerá septiembre en el calendario saludando a nuestra nueva normalidad.

Este último trimestre de año, despues de un “horribilis” segundo, parece traer cierto optimismo dentro de los círculos inmobiliarios, tanto para asesores como para clientes. Muchos de los vendedores y compradores cuyos proyectos de compraventa quedaron paralizados empiezan a retomarlos y aportando nuevos inmuebles para poder ofrecer.

¿POR QUÉ SEPTIEMBRE ES UN MES PARA PLANTEARSE EL CAMBIO?

Estadísticamente, mayo, por el aumento de nacimientos, y septiembre, porque termina el veran o y comienza la rutina, son grandes meses para los cambios de vivienda. Pero, ¿este septiembre se mantendrá la tendencia? Parece que sí.

Septiembre trae la vuelta a la rutina pero también es un mes de cambios tanto profesionales como personales y los cambios de vivienda se disparan. De hecho, aunque hacer una mudanza con estas temperaturas no es algo que nos guste, al tener más tiempo para cerrar con más tranquilidad todo el proceso de compra venta de nuestra casa, nos permite organizarnos mejor y trasladarnos a nuestra casa a principios de septiembre que normalmente coincide con el inicio de los colegios y la inccorporación al puesto de trabajo despues de disfrutar de una vacaciones o , en este caso, de comprar la vivienda de nuestros sueños-

El verano nos ofrece la tranquilidad de estudiar y ver lo que necesitamos, comparar y dejar atrás el nerviosismo que supone ese paso tan importante que es comprar una casa por lo que la decisión se toma con más calma que en meses posteriores o anteriores.

En los últimos años agosto y septiembre han sido meses donde se ha notado considerablemente el aumento de operaciones de compra y venta de viviendas. Generalmente porque en esta temporada se observa un aumento de la oferta y una estabilidad en los precios que pueden incluso hasta descender debido a la bajada de interés de los compradores que se encuentran en sus vacaciones, lo que tambien repercute en que hay menos competencia de personas interesadas y los procesos se alarguen y no sean tan apremiantes.

En general, el verano nos da más tiempo para replantearnos nuestras necesidades en materia de vivienda y, en particular, la cuarentena impuesta este año con motivo del Covid19 ha hecho que muchas familiar se replanteen las necesidades que tienen respecto a su hogar por lo que, con la llegada del verano y de esta “nueva normalidad”, han decidido dar el paso y tienen más tiempo para visitar inmuebles pero, también, para visitar las páginas de los portales inmobiliarios, que siguen en funcionamiento en verano, buscando la vivienda que más se adapta a sus necesidades para que septiembre les encuentre ya con la rutina de trabajos y colegios en una nueva casa.

Y, ¿CÓMO VA A SER ESTE SEPTIEMBRE?

Pues, aunque no somos adivinos y la situacion puede cambiar, parece que hay una tímida recuperación de la situación de principio de año.

Creemos que este septiembre es una buena oportunidad para buscar y cambiar de casa puesto que hay un descenso en los precios, que depende mucho de la situación geográfica en la que se mueva el comprador y del equilibrio entre oferta y demanda porque muchos de los interesados en comprar una vivienda antes de la crisis sanitaria han cambiado su situación laboral y han paralizado esa decisión mientras que, muchos de los propietarios que tenian sus propiedades en venta, necesitan vender, por lo que hay más oferta pero menos demanda ,  y pueden encontrarse buenas oportunidades.

Se espera que la tendencia en los próximos años sea de una estabilización, e incluso bajada, en los precios de las viviendas pero tiene que pasar algo más de tiempo para que podamos establecer el porcentaje de bajada.

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